Alcanzar el cielo con los pies en la tierra

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martes, 31 de diciembre de 2013

Que detrás de un príncipe había un sapo

Estaba harta de ser una princesa encerrada en un cuento lleno de brujas esperando a mi príncipe azul, así que tiré la corona, rasgué mi vestido y rompí mis zapatos de cristal. Estaba harta de tantas perdices que no llegan nunca, de tantos finales inacabados. Muy harta de peinar todos los días mi pelo, de maquillarme con tonos rosas y vestirme pastel. Estaba harta de tanto y de tan poco. Tan harta que abandoné mi palacio.Me fui a ver el mundo, con vaqueros y sudadera, tal y como nunca se vestiría una princesa. Con el pelo al viento y sin peinar. Iba sin rumbo, de bar en bar. Dándome cuenta que los "príncipes" no eran todos iguales y que de nobles caballeros no tenían nada.No tenían ni espada ni caballo, ni vestían de azul, pero todos ellos buscaban su princesa para rescatar.