Elegi.

Elegí llorar por ti de vez en cuando. Elegí creerme tus verdades y creerme a medias tus mentiras. Elegí que no quería otros abrazos, elegí que era tu boca a la que quería besar por el resto de mis días, que no quería otras manos agarradas a las mías. Elegí que tu fueses el motivo de tener totalmente engañados a mis padres por pasar tardes contigo, que no quería ver por la mañana otra cara que no fuese la tuya. Elegí que fueses tú al que le daría todo de mí, que fuesen tus mensajes los que me despertasen cada mañana y así pasar feliz todo el día, contigo en mi mente. Elegí que solo fuesen tus caricias las que me hiciesen volar, que fuese tu llegada la culpable de mis temblores de piernas y de que se me travasen las palabras y también que fuese tu despedida la que me hiciese sentir que se me iba el mundo. Elegí que los veintitres y los veintinueves tuviesen ese algo especial y hacerlos nuestros, elegí que agosto y septiembre fuesen nuestros meses del año . Elegí que tú fueras mi locura y mi cordura, elegí llenar el silencio de la noche con nuestra risa.